Ir al contenido

¿Dios se enoja cuando me siento mal?

Fe cristiana y emociones difíciles

A veces pensamos que sentirnos mal es señal de poca fe. Que si estamos tristes, ansiosas o abrumadas, algo estamos haciendo mal delante de Dios.

Pero ¿y si viéramos esas emociones no como obstáculos espirituales, sino como caminos por donde también se manifiesta Su presencia?


Personajes bíblicos que sintieron como tú

La Biblia está llena de personas que no podían más:

  • Elías pidió morir bajo un árbol, y Dios lo sostuvo con comida y descanso (1 Reyes 19).
  • David lloró en cuevas, sintiéndose olvidado, y aún así escribió salmos que hoy nos consuelan.
  • Jesús, en el huerto, dijo: “Mi alma está muy triste, hasta la muerte” (Mateo 26:38).

No estás sola si te sientes rota. Y no estás mal por sentir.


Dios no se ofende por tus emociones

Dios no se aleja de tu tristeza ni de tu ansiedad. No te exige que estés bien para acercarte. Al contrario:


El Señor está cerca de los que tienen quebrantado el corazón;
él rescata a los de espíritu destrozado.

Salmos 34:18
Nueva Traducción Viviente


A veces, nuestra fe es simplemente eso: seguir orando mientras lloramos. Seguir creyendo mientras sentimos.

Y permitirnos descansar en Dios sin tener que demostrarle nada, porque sabemos ya conoce lo más profundo de nuestro corazón.


¿Qué hago con lo que siento?

La próxima vez que te sientas mal, no corras a esconder tus emociones. Llévalas delante de Él. Aunque no tengas palabras. Aunque solo puedas decir:

“Aquí estoy, Señor, así como estoy.”

Él te ve.

Él te sostiene.

Y Él se queda.


¿Te sentiste identificada?

En Restaurada creemos que la vida cristiana no se vive solo en la victoria, sino también en las lágrimas.

Te invitamos a leer más reflexiones en la categoría Fe práctica y vida cristiana o a seguirnos en Threads para acompañarte cada día.

💛 Estamos aquí para ti.

¿Qué es la Sanidad Emocional y por qué importa en la vida cristiana?